Mi amiga y fiel compañera, que me saca de mil líos, y me mete en muchos otros. La que me ayuda en mi día a día, y la que hace que desespere en ocasiones. Con ella aprendo, me equivoco, hago y deshago.
Cuatro como ella han pasado por mi vida, todas regalos de las personas que más quiero.
-La primera. La robusta máquina de la abuela Tere, con más de treinta años a sus espaldas, pero sigue siendo la que me espera y acompaña cuando vuelvo a casa, y la cual cuida con esmero mi hermana Alejandra.
-La segunda: La pequeñita, mi primera máquina propia, regalo de mi hermano Jacobo, desesperado por verme coser a mano.
-La tercera: Que llegó por Navidad. Mi amor la pidió a Los Reyes Magos para mí. Con ella me puse en serio, me motivó, y comencé este pequeño proyecto que crece cada día.
-Y por último la que veis en la foto: Toda una todo terreno, una buena inversión con ayuda de las personas que más me quieren en este mundo: Mis padres, que me apoyan y sienten mi proyecto como suyo.
Mis máquinas de coser, toda una vida, todo un aprendizaje…y lo que queda.